Después de derretir un agujero a través de la plataforma de hielo de Ross, los científicos hacen un hallazgo sorprendente.
Científicos antárticos han abierto un portal a un mundo de diminutos crustáceos que prosperan en un estuario salado a unos 1.600 pies (490m) por debajo de la plataforma de hielo de Ross, la plataforma más grande de la Antártida.
Científicos de Nueva Zelanda del Instituto Nacional de Investigación del Agua y la Atmósfera derritieron a través de la plataforma con una manguera de agua caliente hasta que descubrieron un río bajo el hielo de aproximadamente 10.5km, un poco más de 274 m de ancho y 243m de profundidad. «Imagínese el puerto de Sydney pero bajo 600 metros de hielo y nieve», dijo Craig Stevens, oceanógrafo de NIWA. Allá abajo, está completamente oscuro, demasiado abajo para que llegue la luz del sol, y extremadamente frío.
No es el lugar ideal para que la vida, encuentre un camino.
Pero cuando bajaron algunos equipos de grabación, se sorprendieron al encontrar que el río estaba lleno de anfípodos. Los crustáceos parecidos a camarones revoloteaban por el lugar, iluminados únicamente por las luces de la cámara.
En un informe de NIWA , Stevens dijo que «ver una de estas cosas te haría saltar de alegría. Nos inundamos».
«Tener a todos esos animales nadando alrededor de nuestra cámara significa que claramente está ocurriendo un importante proceso ecosistémico allí, sobre el cual investigaremos más analizando muestras de agua para detectar cosas como nutrientes», agregó.
Stevens le dijo a CNET que, a veces, había «hordas absolutas» de nadadores zumbando alrededor del lugar. Pero otras carreras de grabación en el río arrojaron muchas menos criaturas. Esta variabilidad, señala, es «parte de la emoción».
Los mundos debajo de la Antártida siguen siendo un lugar misterioso porque acceder a estos ríos bajo el hielo o la columna de agua es particularmente difícil. Tienes que luchar contra el clima y perforar o derretir hielo grueso para enviar drones o equipos de cámara. Es por eso que el famoso barco de Ernest Shackleton, el Endurance, permaneció perdido durante más de un siglo : es muy difícil viajar a estos mundos bajo el hielo. Pero una vez que atraviesas esa barrera formidable, te esperan recompensas infinitas.
«Hasta cierto punto, todo es tan nuevo que simplemente podemos bajar una cámara con una cuerda y obtener escenas nunca antes vistas», dijo Stevens.
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